Millones de hombres se enfrentan a problemas de próstata, y se ven obligados a recurrir a medicamentos o cirugía, que muchas veces terminan por empeorar su calidad de vida. Un nuevo estudio revela que la nutritiva semilla de linaza puede ser usada como una herramienta efectiva a la hora de mejorar los síntomas y recuperar el control de la salud.
Se publicó un estudio en el Journal of Medicinal Food titulado, “Eficacia y seguridad de un extracto de linaza en el manejo sintomático de la hiperplasia prostática benigna: un estudio piloto paralelo, aleatorizado, doble ciego, controlado con placebo”. Este revela que los hombres que consumieron un extracto de semilla de linaza para la próstata inflamada –es decir, hiperplasia prostática benigna– observaron una mejoría significativa en sus síntomas.
La hiperplasia prostática benigna (HPB) es una de las afecciones de salud más extendidas que enfrentan los hombres en la actualidad, con una incidencia que llega a casi el 50% de la población masculina para la octava década de sus vidas. Además, países como China e India ahora están experimentando un aumento exponencial en los diagnósticos de esta condición, a medida que adoptan cada vez más la alimentación, el estilo de vida y el sistema médico occidentales.
En el estudio, tres grupos de hombres, de entre 45 y 75 años, con hiperplasia prostática benigna recién diagnosticada, recibieron un placebo, o una dosis baja o alta de un extracto de semilla de linaza.
Los prometedores resultados se informaron de la siguiente manera: “En este estudio, la suplementación con el extracto de linaza brindó mayor alivio que el placebo en los síntomas obstructivos de la HPB, como la sensación de vaciamiento incompleto de la vejiga, “parar de orinar y seguir”, flujo de orina débil y “esfuerzo para orinar”. Para la semana 8, las dosis bajas y altas del extracto de linaza proporcionaron mejoras estadísticamente significativas en los puntajes de estos síntomas obstructivos, en comparación con el valor inicial. En contraste con esto, el grupo placebo no mostró una mejoría estadísticamente significativa con respecto a estos síntomas obstructivos”.
Además, el grupo del tratamiento no vio ningún signo de aumento de los efectos secundarios, en relación con el grupo placebo, lo que indica que la linaza es sorprendentemente segura frente al tratamiento convencional.
Esperamos que en el futuro se realicen más estudios financiados por empresas sin intereses creados, en los que se compare el extracto de linaza con la intervención farmacéutica y quirúrgica, con el fin de establecer su verdadero poder.
Finalmente, la hiperplasia prostática benigna cae dentro de la categoría de una condición que involucra el crecimiento anormal del mismo tejido epitelial dentro del que emerge el cáncer. Como se ha descubierto que la linaza previene e incluso retrasa el crecimiento de epitelios cancerosos, como el cáncer de mama, es muy probable que el consumo de semillas de linaza también sea la mejor póliza de seguro para prevenir el desarrollo del cáncer de próstata.
Fuente: www.greenmedinfo.com