Por décadas hemos escuchado sobre los peligros del colesterol alto, pero ¿sabías que el colesterol bajo puede hacer que nos volvamos violentos con nosotros mismos y con los demás, y que ha sido vinculado con envejecimiento prematuro, otros efectos adversos de salud e incluso muerte?
En un mundo que se ha vuelto loco con la ansiedad anticolesterol, donde engullir medicamentos diseñados para hacer que el cuerpo deje de sintetizar el colesterol es de alguna forma considerado un comportamiento sano, resulta alentador darle una mirada a la investigación que existe sobre los beneficios saludables del colesterol, o los peligros del colesterol bajo.
Beneficios del colesterol
- El colesterol es necesario para prevenir la agresión: durante por lo menos treinta años se ha sabido que niveles bajos de colesterol sérico están asociados con tendencias violentas reiteradas bajo la influencia del alcohol. Desde entonces, hay al menos ocho estudios que han confirmado o explorado el vínculo entre la violencia y el colesterol bajo, incluyendo tanto la autoviolencia como la violencia hacia terceros. Una de las posibles explicaciones para esta asociación fue discutida en un artículo publicado en el British Journal of Psiquiatry en 1993: “Una de las funciones de la serotonina en el sistema nervioso central es la represión de impulsos dañinos del comportamiento. El bajo colesterol de membrana disminuye el número de receptores de serotonina. Dado que el colesterol de membrana se intercambia libremente con el colesterol que está en el entorno, una concentración reducida de colesterol sérico, puede contribuir a una disminución en la serotonina del cerebro, con una menor supresión del comportamiento agresivo”. No es de sorprenderse, entonces, que hayan surgido varios informes que indican que las drogas estatinas para bajar el colesterol contribuyen a la irritabilidad y la agresión.
- El colesterol es necesario para combatir el cáncer: la relación inversa entre los niveles de colesterol y el riesgo para varios tipos de cáncer y mortalidad asociada al cáncer, ha sido conocida desde finales de la década de los 80. Desde entonces, la conexión cáncer-colesterol bajo ha sido confirmada una y otra vez. Es de esperar, por lo tanto, que el uso de las drogas estatinas estuviera vinculado con un aumento en la incidencia de cáncer, algo que de hecho es así. Incluso si se administra el llamado colesterol malo (LDL) a un cultivo de células de leucemia altamente malignas y resistentes a fármacos múltiples, las células pierden su resistencia a la quimioterapia, “lo que no quiere decir que la quimioterapia médica sea buena, porque siempre provoca daño colateral.”
- El colesterol es necesario para pre- venir el accidente cerebrovascular hemorrágico: hay dos formas de accidente cerebrovascular: isquémico, asociado con una falta de flujo de sangre y oxígeno al cerebro, y hemorrágico, asociado con la ruptura de vasos sanguíneos en el cerebro y sangramiento. El riesgo del primero, en teoría, podría verse aumentado en presencia de una cantidad excesiva de colesterol oxidado. Sin embargo, es el riesgo del segundo, el accidente hemorrágico, el que aumenta cuando los niveles de colesterol son bajos. Ya en 1994, en el British Medical Journal, en un artículo titulado “Evaluando las posibles amenazas de la reducción del colesterol sérico”, los investigadores encontraron que “La única causa de muerte atribuible a una baja concentración de colesterol sérico fue el accidente cerebrovascular hemorrágico”.
- El colesterol es necesario para la memoria: el colesterol bajo HDL ha sido identificado como un factor de riesgo para déficit y declive en la memoria de la mediana edad. Incluso en la enfermedad de Parkinson, las concentraciones de colesterol sérico totales más altas están asociadas a una progresión clínica más lenta de la enfermedad. Las drogas estatinas –que inhiben la producción de colesterol afectando por ende seriamente el cerebro– deben ahora, por requerimiento de la FDA, exhibir en su envase una advertencia negra que indique que ese medicamento puede afectar adversamente la memoria.
- El colesterol es necesario para la longevidad: en un fascinante estudio publicado en la revista científica Public Library of Science en 2011, la longitud del telómero –los extremos tipo gorro de los cordones de los cromosomas que previenen el daño al ADN asociado con envejecimiento celular– estuvo vinculado a niveles de colesterol total y LDL más altos. Entre más grande la extensión de estos gorros protectores, más alto el colesterol. De hecho, varios estudios indican que el colesterol más bajo está asociado con un aumento en la mortalidad.
- El colesterol nos ayuda a combatir las infecciones: Se ha observado que una dieta rica en colesterol mejora a los pacientes con tuberculosis, llevando a los investigadores a sugerir que “el colesterol debería usarse como una medida complementaria en el tratamiento antitubercular.” Las drogas que bajan el colesterol, por cierto, exhiben propiedades inmunosupresoras y potentes propiedades inmunotóxicas, probablemente y en parte, debido a sus efectos de reducción del colesterol.
Dado que el colesterol es esencial para toda la vida animal, y que cada célula es capaz de sintetizarlo desde moléculas más simples, no deberían sorprendernos los ejemplos entregados aquí de los significativos beneficios para la salud del colesterol.
Tampoco debería sorprendernos que las drogas para bajar el colesterol tengan más de 300 efectos adversos para la salud. Por ahora, basta decir que la práctica médica convencional haría bien en recibir instrucción de los principios básicos de la biología, en vez de caer presa de copiar el marketing de las farmacéuticas, como lo hace cada vez más.
Para fuentes y referencias de este artículo, favor visite: www.greenmedinfo.com/blog/
underreported-dangers-low-cholesterol
Granja Magdalena
El guardián de la Salud